La tierra del sol de medianoche

Debido a las grandes diferencias entre estaciones, los finlandeses están acostumbrados a los contrastes. Los oscuros inviernos árticos tienen su contraparte en uno de los fenómenos naturales más emblemáticos de Finlandia, el sol de medianoche.

Muchos se preguntan cómo pueden sobrevivir los finlandeses sin luz solar durante el invierno: la naturaleza responde con 24 horas de sol en verano. El intenso contraste de las condiciones lumínicas tiene un profundo impacto en todos los ámbitos de la sociedad en Finlandia.

Comprensiblemente, los espacios públicos cobran vida en verano. Tras el duro invierno, los interminables días de sol llegan justo a tiempo. Los finlandeses pasan el verano fuera de casa, disfrutando de la corta pero agradable estación en la que todas las preocupaciones quedan a un lado hasta que la noche vuelve a oscurecerse.

El verano en Finlandia es una estación espectacular. Para quienes se atrevan a ir más allá del círculo polar ártico, el sol no se pone en absoluto entre mayo y agosto, mientras que, más hacia el sur, el sol puede ser visible durante prácticamente las 24 horas del día en junio y julio.

Cuando las noches son tan luminosas como el día, puedes hacer las mismas cosas que harías durante el día. La mayor diferencia está en el increíble cambio del tipo de luz. El sol cobra un tono rojizo amarillento (casi como el amanecer y el anochecer) y una luz increíblemente cálida y brillante lo baña todo a tu alrededor.

Un baño nocturno y una sauna bajo el sol de medianoche son experiencias que no te puedes perder. A partir de junio se empieza a calentar el agua de los lagos y el mar.

La forma de recibir al sol de medianoche por excelencia es es una cabaña. Muchos finlandeses tienen una cabaña familiar, por lo general, un pequeño retiro privado junto al lago en alguna parte. A los finlandeses les gusta la tranquilidad; los visitantes también deberían experimentar la relajación al más puro estilo nórdico en un apacible escondrijo y huir de la rutina diaria.

Algunas personas tienen un enfoque diferente. El sol de medianoche alarga el día y te concede todas esas horas extra que siempre necesitas en tu vida diaria. Aprovéchalo para hacer senderismo, remar, pescar o echar una partida de golf a altas horas de la madrugada.

Una antigua creencia popular sobre la mitología del sol de medianoche dice que, cuando una joven doncella coloca siete flores bajo la almohada durante la noche del solsticio de verano (el día más largo del año), su futuro prometido se le aparecerá en sueños.

El mejor lugar para experimentar el sol de medianoche es la Laponia finlandesa. En el mes de junio, el festival de cine Midnight Sun Film Festival (creado por los conocidos cineastas los hermanos Kaurismäki) y el festival folclórico Jutajaiset son dos oportunidades magníficas de disfrutar de la cultura local y del sol de medianoche.

En el sur, la mejor época para disfrutar del sol de medianoche es en fechas próximas al solsticio de verano. Una tradicional fiesta del solsticio de verano en la isla de Seurasaari en Helsinki o un festival de rock en el corazón de la Región de los lagos comparten la magia de las noches blancas.

Para los niños finlandeses, las tardes de verano significan que no hay hora de irse a la cama. Hay una época para dormir y se llama invierno: no tienes más que preguntar a los osos y otros mamíferos que hibernan durante la mayor parte de él.

Nuestro consejo es que no te preocupes por dormir: ¡saca el máximo provecho del sol de medianoche!